top of page

5 TIPS DE CÓMO ABORDAR LA SOLEDAD CUANDO TELETRABAJAS

Estos dos últimos años nos ha traído muchas sorpresas. A día de hoy, mayo de 2022, es fácil observar cómo se ha dado una rápida digitalización del trabajo en prácticamente todas las áreas profesionales, con sus desafíos y oportunidades.

El trabajo desde casa es una realidad para muchos de nosotros, y por muy romántico y cómodo que pueda parecer despertarse con calma, dar 6 pasos para preparar un café y ponerse a trabajar desde nuestro ordenador, existen retos que son importantes mencionar y compartir entre los trabajadores digitales.

En este artículo queremos centrarnos en uno de los desafíos más sutiles, silenciosos y peligrosos del trabajo en remoto: La Soledad.

Cuando trabajamos en remoto, sin contacto directo con los compañeros de trabajo, sin entrevistas presenciales, sin una charla informal o una broma inesperada en la oficina, puede ocurrir que nos sintamos aislados, solos y desconectados. Aunque pueda parecer exagerado, no debemos subestimar la soledad en el trabajo en remoto, ya que puede ser el origen de otros problemas que afectan nuestro rendimiento y bienestar.

De hecho según el reconocido doctor Douglas Nemecek, la soledad tiene el mismo impacto en la mortalidad que fumar 15 cigarrillos al día, lo que la hace aún más peligrosa que la obesidad.


¿Te has sentido desmotivado, triste, con dudas sobre cuál es el objetivo real de tu trabajo? ¿Te desmoraliza no ver los resultados reales de tu esfuerzo, sin personas que te den la mano, te digan gracias mirándote a los ojos y celebren contigo las alegrías? ¿Echas de menos las risas en el trabajo, el compartir el peso de los desafíos y el estrés psicológico de las fechas límite?

Es fundamental reconocer si hemos padecido alguna de estas frustraciones silenciosas, para poder comprenderlas y abordarlas.

Te compartimos algunos consejos que, en base a nuestra experiencia, nos parecen efectivos para superar estas dificultades derivadas del sentimiento de soledad del trabajo en remoto.


Toma perspectiva

En primer lugar, recuerda cuáles fueron las causas por las que decidiste trabajar en remoto. ¿Cómo imaginaste que sería? ¿Qué ventajas y beneficios te hicieron dar el salto a esta nueva realidad? Nuestro consejo es que nunca olvides el impulso original de tu decisión a esta aventura en remoto, y que cada comienzo de estación, te des un tiempo para recordar y comprender el por qué de tu decisión. Por el contrario, si la situación de la pandemia te forzó a trabajar desde casa, entonces es posible que esta soledad inesperada y obligada esté siendo un verdadero desafío para ti. Te invitamos a que leas estas líneas con alivio, curiosidad y empatía, porque por si no lo sabías, es completamente normal lo que estás sintiendo.


No estés sola, busca a tu comunidad

En segundo lugar, debes tener presente que, en la mayoría de los casos, nadie nos prepara para largas jornadas laborales en soledad. Una pantalla de ordenador y una llamada telefónica difícilmente suplirán la calidez humana que se desprende del trato en persona. Como humanos que somos, nos nutrimos de interactuar, socializar y compartir de forma cercana con los demás, y sentirnos solos amenaza nuestra necesidad básica de pertenencia a un grupo.

Nuestro segundo consejo es que si te das cuenta de que “estás solo”, trates de tomar medidas al respecto, bien asegurando tu dosis de socialización antes o después del trabajo, o bien durante. Cada vez es más grande la comunidad de personas que al igual que tú trabaja en remoto, por lo que es probable que cerca de donde vives haya más gente en tu situación teletrabajando desde un coworking u oficinas compartidas. Encuentra el lugar donde podrás encontrar personas que te entienden y estén dispuestas a compartir tus éxitos y aprendizajes.


Resetea tu conexión personal

En muchos casos el sentimiento de soledad y carga de la rutina es tan grande que conviene atacarlo de raíz. Una terapia de choque pueden ser los Colivings, especialmente los rurales, y te explicamos por qué.

El sentimiento de soledad relacionado con el trabajo en remoto está muy relacionado con una falta de Conexión a varios niveles. Con frecuencia el deseo de pertenencia que señalamos en el punto anterior nos hace desconectarnos de nosotros mismos, poniendo empeño en construir un personaje que encaje dentro de los patrones socialmente aceptados en nuestro entorno.

Al hacer esto, incrementamos la división egoica y nos desconectamos paradójicamente de nuestra Comunidad y la Naturaleza. Esto nos hace construirmos en base a lo que según otros dicen que deberíamos ser, y no a lo que somos en lo más profundo de nosotros mismos.

Nuestro consejo es observar si este sentimiento de soledad se debe a esta división. Fíjate si estás demasiado centrado en tus éxitos personales y ambiciones construidas. Un indicio suele ser el pasar días sin hablar con un amigo, vecino ni familiar, ni siquiera por llamada o videollamada en uno de tus breaks en el trabajo.

Si es así, salir a tomar el aire en la Naturaleza o vivir en comunidad con otras personas, te puede ayudar a salir de tí para paradójicamente volver a ti.

Y no existe mejor lugar que los Colivings Rurales, espacios diseñados para generar relaciones profundas entre la comunidad teletrabajadora y la local. Desde Rooral te animamos a conocer alguna de estos 9 Colivings Rurales en España y Portugal, que seguro que abrirán tu perspectiva sobre lo que es posible reconectar trabajando en remoto desde un entorno natural y comunitario.


Cuida tu espacio y tu batería

A menudo el sentimiento de soledad llega cuando estamos saturados de trabajo, cansados y desequilibrados emocionalmente. El trabajo nos estresa y las fechas límites nos superan. Es exactamente esto de lo que hay que darse cuenta: debemos tomar medidas antes de que pasemos a un punto de no retorno. No esta demas apuntar a que trabajar en remoto desde el pueblo mejora tu bienestar (haz click aquí para ver porqué).

Para ello hay infinitud de recomendaciones que expertos aseguran pueden ayudarte a hacer tu jornada laboral más llevadera. Desde tomarse descansos regulares (hay muchxs que se ponen la alarma para recordarse la hora de los breaks), tener un espacio en casa dedicado exclusivamente al teletrabajo o crear una rutina matutina saludable.


Separa tu vida personal de la profesional

Nuestro último consejo tiene que ver con separar tareas y momentos durante la semana, que hagan que tu trabajo sea más ameno y llevadero.

Hay muchas personas con muchas ganas de conocer gente como tú, de hacer deporte, de dar una vuelta y ver el atardecer. Nuestro consejo es que levantes la vista del ordenador cuando te invadan esos sentimientos de soledad y te regales unos minutos al día para hacer aquello que te llena de alegría, que te relaja o que te hace sonreír.

Planifica el día reservando unos minutos para ese momento especial, para ese momento social, para esa llamada con tu amiga o ese taller de cerámica. La inspiración viene a menudo de la diversidad de experiencias, así que no te prives de experimentar cambios en tu semana.

¿No eran la libertad y la autonomía dos de las causas por las que elegiste el trabajo en remoto? ¡A por ellas entonces!


Esperamos que tras leer este artículo, el sentimiento de soledad en el trabajo en remoto deje de ser tan abrumador o al menos tengas herramientas con las que detectarlo y combatirlo.

Os animamos a observar la raíz de esta soledad y a tomar las decisiones que pongan fin a esos días en los que nada parece que nos levanta el ánimo. Un día tiene 1440 minutos. ¡Vamos a aprovecharlos!




bottom of page